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¿Cuánto tiempo estás dispuesto/a a perseguir tus sueños?

¿Cuánto tiempo estás dispuesto/a a perseguir tus sueños? La realidad es que la mayoría de las personas se rinden demasiado pronto ante cualquier dificultad o porque el objetivo parece ser más difícil de alcanzar de lo que pensaban originalmente.

Solo tienes que echar un vistazo a tu alrededor para comprobar que apenas un pequeño porcentaje de las personas que se marcan una meta logran sus objetivos.

Darse por vencido es tan común que es fundamental analizar las razones por las que la mayoría de las personas fracasan. Estos son algunos de los problemas y complicaciones clave que hacen que muchas personas abandonen sus metas demasiado pronto.

Falta de disciplina

La búsqueda de una meta requiere compromiso y mucha disciplina. Muchas veces nos falta constancia, determinación y voluntad para trabajar duro. La mayoría de la gente quiere alcanzar un objetivo final sin tener que esforzarse.

La falta de disciplina para esforzarse día tras día sin esperar resultados inmediatos es probablemente la razón número uno por la que la gente se da por vencida.

Incluso si la tarea es pequeña, se requerirá cierto nivel de compromiso. Las excusas y la pereza son los mayores enemigos del éxito.

Hacer crecer la fuerza de voluntad no es fácil. El proceso comienza con una buena comprensión de las propias fortalezas y debilidades. El secreto está en reforzar los aspectos más positivos de nuestra personalidad y buscar alternativas para corregir nuestras debilidades.

Dejarse sugestionar por las opiniones de los demás

“¿Estás loco/a? Eso es muy complicado”. “A tu edad ya no merece la pena estudiar”. «Búscate un trabajo normal»…

La gente opina sin conocimiento, o simplemente reflejan sus propias limitaciones y frustraciones. El problema es que muchas personas se dejan sugestionar por estas afirmaciones y acaban por tomar el camino más fácil.

Si bien las influencias positivas pueden ayudar a una persona a reforzar su potencial, las influencias negativas evitarán que muchas otras persigan y alcancen sus sueños.

Darle a otros el poder de influir en tus decisiones es uno de los mayores errores que puedes cometer.

Hay que ser consciente de que las cosas que son importantes para ti pueden parecer una tontería a los ojos de otra persona, pero eso no significa que sea así. De hecho, por mi experiencia,  más bien es al contrario.

El miedo a ser juzgados o vistos como ilusos por la familia, amistades o determinada comunidad es otra razón por la que muchas personas abandonan sus metas incluso antes de comenzar.

Las ideas revolucionarias suelen ser valores atípicos. No son fácilmente aceptados o adoptados por la sociedad. La gente opera sobre la base del hábito y la tradición.

Por lo tanto, algo nuevo que pretendas hacer con tu vida podría verse como algo ridículo a los ojos del “rebaño”.

Al perseguir un sueño, debes rodearte de personas de confianza y de mentalidad abierta. Sus consejos pueden ser beneficiosos, aunque no se encuentren totalmente de acuerdo con tus ideas. La opinión de todos los demás no tiene por qué preocuparte.

Distracciones diarias

Es un hecho que todos tenemos responsabilidades que no se pueden desatender. Estas responsabilidades se convierten en un problema, sobre todo a la hora de encontrar tiempo para dedicarlo a nuestro objetivo.

El sueño se vuelve demasiado abstracto para perseguirlo y la mayoría de las personas acaban por rendirse.

Vivimos en un mundo muy dinámico. Acceso instantáneo a la información, acceso instantáneo a la comunicación, acceso instantáneo al entretenimiento… Nos hemos acostumbrado a llevar vidas aceleradas y también nos hemos acostumbrado a querer una gratificación inmediata.

Un objetivo serio a veces requerirá meses, incluso años para hacerse realidad. Los sueños y las metas específicas requieren constancia y determinación.

No creer lo suficiente en uno/a mismo/a

¿Crees en tu capacidad para hacer realidad tu sueño? Si la respuesta es no, eres muy parecida  a la mayoría de las personas.

La falta de fe en las propias habilidades y fortalezas es una razón muy común para el abandono de las metas personales.

La mentalidad lo es todo cuando se trata de romper con las barreras psicológicas.

Si piensas que no puedes, lo más seguro es que no podrás. Si piensas que puedes, te irás encontrando en el camino las señales y las conexiones para lograr alcanzar los resultados esperados.

Un pequeño fracaso es suficiente para abandonarlo todo

Para algunas personas, una pequeña piedra en el camino es todo lo que necesitan para justificar el abandono de sus objetivos.

Sin embargo, las personas exitosas coinciden en que los fracasos son totalmente necesarios para aprender, mejorar y alcanzar la meta. ¿Cuál es tu enfoque?

La gran mayoría de la gente se da por vencida después del primer tropiezo. Les falta la fuerza para aprender de los errores y utilizarlos como motivación.

Para tener éxito, tendrás que convertir cada fracaso en una nueva oportunidad. El fracaso es algo natural. Cuando aprendemos a caminar nos caemos cientos de veces antes de conseguir mantenernos en equilibrio. Pues así funciona el resto de la vida…

¿Qué vas a hacer?

Estas son solo algunas de las razones por las que tantas personas abandonan sus metas y sueños. Se podrían resumir en un solo concepto: el miedo. Sin embargo, no hay nada de lo que temer. El final es para todos igual, así que disfruta del camino y que nada ni nadie te paren.